En el presente artículo vamos a dar comienzo a la consideración de las distintas categorías de preguntas de examen; a saber: selección múltiple (en México se llama opción sencilla), complementarias, emparejamiento, verdadero-falso y ensayo. Primero daremos un vistazo a las preguntas de selección múltiple.
SELECCIÓN MÚLTIPLE: Generalmente este tipo de pregunta está considerado de más valor y utilidad hoy en día. Quizás sea porque es la forma que mide bien los resultados deseados en la educación. Por ejemplo, indaga el conocimiento, comprensión, habilidad de solucionar problemas, habilidad de reaccionar bien a ciertos problemas, y habilidad de razonar. Se forma este tipo mediante una pregunta clave (o con un tallo que implica una pregunta directa) con varias posibilidades de respuesta. Hay varias sugerencias sobre cómo preparar una pregunta de selección múltiple.
1. Desarrolle las preguntas a base de declaraciones de vigencia e importancia. Dichas declaraciones deben ser independientes, significativas y válidas.
2. Escoja preguntas e ideas teniendo en cuenta la facultad de los alumnos de discriminar y razonar.
3. Haga un borrador primero para que en las revisiones subsecuentes para el examen final le sean convenientes.
4. Empiece las preguntas con una declaración que razonablemente puede ser contestada. No ponga contestaciones absurdas ni tampoco capciosas.
5. Redacte la contestación de tal manera que sea clara y concisa pero que no indique cuál es la correcta.
6. Incluya un elemento verosímil en las contestaciones alternativas para interesar a algunos de los alumnos.
7. Siempre de las instrucciones necesarias en forma muy clara para que los alumnos no pierdan tiempo.
EJEMPLO: 1. SELECCIÓN MÚLTIPLE. Escoja la frase que mejor corresponde a la premisa y escriba la letra correspondiente en la línea provista a la derecha.
1. En la elaboración de un sermón, se debe pensar primero en:
a. el tema
b. el texto
c. el propósito
d. la introducción
