Por Betty de Grams En varias ocasiones he oído a hermanos hacer observaciones acerca del ministerio de la enseñanza que están equivocadas y que revelan un aprecio incorrecto del papel de un maestro. Puesto que el concepto que tenemos de lo que hacemos afectará el éxito futuro, mencionaré cuatro de estas ideas erróneas. 1.
Formación del carácter
Por Oscar Enrique Barillas “He aquí como el barro en la mano del alfarero, así sois vosotros en mi mano” (Jeremías 18:6) . Forjadores de carácter somos los que tenemos la oportunidad de ser maestros de la Palabra de Dios. No importa a qué nivel enseñemos –ya sea a adultos, jóvenes o niños. “¿No